En 2018, John, un usuario de Bitcoin de Estados Unidos, confió su dinero en el exchange QuadrigaCX. Él pensó que sus fondos estaban seguros en manos de profesionales, pero en realidad, sucedió lo peor. El fundador del exchange falleció y se llevó consigo las claves privadas que permitían el acceso a los fondos de los usuarios. Como resultado, John y muchos otros perdieron todo su dinero en el exchange.
Después de este episodio desafortunado, John decidió ser más cuidadoso con sus inversiones de criptomonedas. Sin embargo, en 2022, sucedió de nuevo. John confió sus fondos en el exchange FTX, uno de los mayores y más respetados exchanges del mundo, pero nuevamente perdió todo. La compañía sufrió un ataque de hacking y todos los fondos de los usuarios fueron robados.
La experiencia de John es un recordatorio de que no se puede confiar completamente en terceros, especialmente en el mundo de las criptomonedas. Los usuarios deben ser responsables de sus propios fondos y utilizar la autocustodia como una forma de proteger sus inversiones. En este artículo, exploraremos los beneficios de la autocustodia de Bitcoin y por qué puede ser la mejor opción para los inversores de criptomonedas.
Pierde el miedo a la autocustodia
Siempre suelo escribir mis artículos con una pequeña historia introductoria generada a través de inteligencia artificial. La historia de John es ficticia, elaborada con IA, pero basada en sucesos reales.
A pesar de la corta vida de Bitcoin, hemos sido testigos de la cantidad de eventos que han dado lugar a pérdidas millonarias, siendo los usuarios quienes asumen estas pérdidas. Y todo por el mero hecho de no querer custodiar sus propios fondos.
Considero que lo más importante para empezar a custodiar bitcoin es perder el miedo. Un usuario principiante irá a lo sencillo: registrarse con su correo y su contraseña en un exchange centralizado y comprar con tarjeta bancaria. Si se pierde tu contraseña, te darán una nueva, qué tranquilidad, ¿no? Que le pregunten a John…
Empezar a comprar bitcoin en un exchange centralizado es muy sencillo. Pero más fácil no significa que sea lo mejor, ni lo más seguro.
Bien, perder el miedo a la autocustodia es clave, así que a lo largo de este artículo intentaré demostrarte que ser custodio de tu bitcoin no es difícil, ni peligroso.
¿Dónde se guardan los fondos?
Para empezar a perder el miedo a la autocustodia, es importante que conozcas cómo se almacenan los fondos en la cadena de bloques. Para hacerlo muy fácil y visual, te pondré un ejemplo.
Imagínate que tienes una enorme caja fuerte. Esta caja fuerte representa la cadena de bloques, y tú vas a guardar tus bitcoins ahí dentro. La caja fuerte tiene muchas estanterías. Cada estantería representa una red en la que podemos almacenar diferentes criptomonedas. Por ejemplo: en la primera estantería tenemos la red Bitcoin, en ella solo podremos almacenar bitcoins. En la siguiente estantería tenemos la red Ethereum, en la que podremos almacenar, además de Ethereum, cualquier criptomoneda compatible con ERC20. Otra estantería de Binance Smart Chain, otra de Solana, otra de Hedera… y así tendremos tantas estanterías disponibles como criptomonedas existan. Podemos hacer uso de las estanterías que nos dé la gana, o usar solo una. Ningún otro usuario podrá almacenar ahí sus criptomonedas, esa es nuestra caja fuerte, y es única.
La caja fuerte tiene una peculiaridad: es transparente. Es inaccesible, solo puede acceder quien tenga la llave de acceso (frase semilla o clave privada), pero cualquier persona puede ver lo que hay dentro y los movimientos que se han realizado, aunque no tenga la frase semilla.
Es importante que entiendas bien la analogía de la caja fuerte. Si no te ha quedado demasiado claro, te recomiendo que vuelvas a darle otra lectura.
¿Cómo saber que nuestra billetera es de autocustodia?
Bien, ahora imagínate que tú quieres empezar a custodiar tus propios fondos. Hay billeteras que te van a facilitar esa caja fuerte. Sí, te darán una caja fuerte para ti, única y exclusiva, en la que podrás almacenar bitcoin y cualquier criptomoneda. Ledger, Trezor, BitBox, Relai, Coinomi, Exodus… Hay decenas de billeteras con la que empezar la autocustodia sin depender de terceros. Si quieres echar un vistazo a algunas de las que hay y filtrar por sus características, aquí puedes verlas.
La clave para saber si la billetera es autocustodia o no es que se generará la frase semilla de 12 ó 24 palabras (en inglés) para que las anotemos. Si no sucede esto, es que no hay autocustodia. También debes saber que no es necesario registrarse ni aportar ningún dato personal.
¿Qué es una billetera?
Volvamos al ejemplo de la caja fuerte. Una billetera privada no es la caja fuerte, no. La caja fuerte es tuya, pero permanece en la blockchain. La billetera sería la pasarela con la que tú puedes interactuar con lo que hay dentro de tu caja fuerte. ¿Quieres acceder a tu caja fuerte a través del móvil? Pues necesitarías una billetera que soporte Android o iOS para poder acceder a tu caja fuerte. Si preferimos acceder a nuestra caja fuerte desde un PC, pues tendríamos que instalar en él una billetera compatible con Windows o el SO que tengamos.
Sé que puede parecer un poco lío, pero es más sencillo de lo que parece. Te sugiero repetir la lectura de cada apartado hasta que quede claro.
Tipos de billeteras
Las billeteras que más se usan son de dos tipos: de hardware y de software.
Las billeteras de hardware o cold wallets suelen ser más seguras, pues al no estar conectadas a internet, es más difícil que un hacker pueda acceder a tu billetera de forma remota, ya que necesitaría de forma física el dispositivo para autorizar las transacciones. Algunas de ellas son Ledger, Trezor, BitBox, Safepal…
Las billeteras de software o hot wallets tienen una seguridad más laxa, pues un malware en tu móvil o PC podría vulnerar la seguridad y el atacante robarte los fondos. Algunos ejemplos son: Metamask, Trust Wallet, HashPack…
La llave de la caja fuerte: frase semilla
Aún nos queda lo más importante. Tenemos la caja fuerte, la pasarela con la que podemos interactuar con ella, pero nos falta la llave.
La llave de la caja fuerte es la frase semilla (seed phrase). Es un conjunto de 12 ó 24 palabras ordenadas.
Cuando instalas una billetera de software o cuando configuras una billetera de hardware, lo primero que ocurrirá es que se generará una frase semilla, la cual deberás anotar y custodiar de forma diligente.
Con la llave ya tenemos acceso total a los fondos. Esta frase semilla es la parte más importante, cualquiera que disponga de ella podrá acceder a tus fondos con total libertad. De ahí la importancia de no compartir con nadie las palabras, ni sacarles fotos, ni escribirlas en un teclado, ni decirlas en voz alta… Protegerlas del agua y del fuego es muy buena idea. Puedes grabarlas en acero, dividirla en varias partes y esconderlas, lo que se te ocurra.
Estas palabras las podemos cargar en cualquier billetera y ya tendríamos acceso total a los fondos que estén en esa caja fuerte. Cuando instalas una billetera te preguntará si deseas crear una wallet (caja fuerte) nueva o importar una existente. Si tenemos ya nuestra frase semilla, solo tendríamos que importar una existente.
Consideraciones finales
La caja fuerte es tu lugar en el que guardas los criptoactivos y está en la blockchain. Una billetera te permitirá interactuar con la caja fuerte, y puedes elegir la billetera que más se adapte a ti. La pieza más importante es la llave, la frase semilla. Es la única forma de acceder a los fondos. Da igual que tengas la última Ledger del mercado, si alguien encuentra tu frase semilla, podrá robarte tu dinero desde cualquier parte del mundo.
La cuestión ahora es, ¿es más fácil guardar 24 palabras durante 100 años, o confiar en que tu exchange centralizado durará esos 100 años? Yo lo tengo claro, no lo dudes más y empieza con la autocustodia, es el paso lógico para holdear bitcoin. Evita riesgos innecesarios y no confíes en nadie.
¿Quien es Iván López?
Es el creador de CriptoATH, un apasionado del mundo de las criptomonedas desde 2017. Se especializa en el análisis fundamental, así como en la educación de los inversores principiantes. Se dedica a seguir de cerca las últimas tendencias y noticias, compartiendo su conocimiento a través de su blog para ayudar a otros a entender y beneficiarse de este emocionante espacio financiero.
